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Midsommar es la segunda entrega del director Ari Aster que sorprendio a propios y extraños con Hereditary.

Si hay un estudio que ha adquirido una relevancia inusitada sin lugar a dudas es la casa productora y distribuidora A24.

Sus filmes y apoyo a pequeños estudios le dan a los proyectos que llevan su firma ese toque independiente y sobre todo una frescura creativa pocas veces vista. Nos recuerda al cine de los años setenta y es a mi juicio algo digno de remembranza; reiterando y subrayando que un gran bastión para su éxito son las oportunidades que le están dando al talento más joven, sobre todo en el género del thriller psicológico.

Jordan Peele, Robert Eggers y el director de este proyecto, Ari Aster, son la tercia mágica de este renacimiento del género del terror y suspenso; la frescura y creatividad en sus historias que están llevando de la mano con un ligero toque de comedia o situaciones más familiares para la mayoría de la audiencia.

Además están dejando de lado el recurso viejo y confiable que eran los jumpscares regalándonos nuevas formas y sensaciones que toda la crítica cinematográfica están comenzando a saborear de una forma tan digna que están incluso siendo considerados a grandes honores más allá de premiaciones propias del género.

Los problemas de relación que llevan la joven pareja formada entre Cristian (Jack Reynor) y Dani (Florence Pugh) parecerían que son los últimos clavos en el ataúd para el definitivo entierro de un futuro juntos; sin embargo una esperanza saldrá a flote con todo y la negativa de los amigos más cercanos de Cristian; siendo está un místico campamento veraniego en un pueblito de Suecia.

La tradición de este retiro veraniego de cada noventa años llevara con mucha ilusión a Dani y Cristian para buscar un nuevo equilibrio en sus vidas.

El ambiente jovial y amoroso poco a poco se irá desvaneciendo, todo esto provocado por los raros rituales que se viven en la paradisíaca población, por lo cual la joven pareja tendrá que poner a prueba no solo su amor, sino su instinto natural para poder salir vivos de está amorosa amenaza.

El segundo filme de Ari Aster que vivió en México su estreno (bastante retrasado a la taquilla mundial) en el “Festival Macabro” de la ciudad de México es sin duda una continuación no explícita de su anterior proyecto Hereditary, sigue conservando esa frescura y suspenso que si bien no a muchos encanta, en lo personal a mi me tiene bastante cautivado, creo que de a poco se está formando una nueva “secta” de directores del género del terror/suspenso/thriller psicológico y todo es como mencionamos anteriormente en este texto gracias a la distribución del estudio A24.

Por otro lado es muy loable el destacar la gran fotografía que imprime Pawel Pogorzelski, las brillantes tomas y efectos son un elemento importantísimo que nos ayuda a transportarnos a la angustia que vive Dani (Florence Pugh) durante las poco más de dos horas que nos tendrá al filo de nuestras butacas el nuevo idilio de Ari Aster.

Las actuaciones del cast en Midsommar son bastante cumplidoras, destacando por nombre propio la rubia Florence Pugh; en lo personal me genera mucho entusiasmo ver su evolución y sobre todo el que me deja bastante entusiasmado de apreciar sus futuros proyectos.

El terror puede manifestarse de muchas formas; la fórmula básica del jumpscare en una casa abandonada está quedando en el recuerdo, Ari Aster con Midsommar nos está mostrando que lleva mano en esta revolución del género y de momento le planta cara a Jordan Peele con Us y nos deja esperando ansiosos el toque final de Robert Eggers y su The Lighthouse que llegara a finales de año.

Midsommar

  • Dirección: Ari Aster
  • Reparto: Florence Pugh, Jack Reynor, Will Poulter, William Jackson Harper, Ellora Torchia
  • Año / País: 2019 / Estados Unidos
  • Duración: 145 min
  • Guión: Ari Aster
  • Música: Bobby Krlic
  • Fotografía: Pawel Pogorzelski
  • Productora: B-Reel Films / Parts and Labor. Distribuida por A24
  • Género: Thriller psicológico
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