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Peter Murphy, quien fuera vocalista del grupo Bauhaus, entregó una noche muy especial en México. El Plaza Condesa fue el recinto donde su show electro-acústico nos deleitó.

El recinto se llenó rápidamente y en su mayoría personas muy adultas, de 30 años para arriba. Pocos jóvenes, puesto que Peter Murphy, que tiene más de 30 años de carrera ya no figura como un éxito comercial contemporáneo, pero el talento y gran legado musical nadie se lo va a quitar.

El escenario en penumbras, con un sonido tranquilo, muy atmosférico mientras esperábamos la salida de Peter Murphy.

En punto de las 9 de la noche, sin avisar agua va, salió Peter acompañado de otros dos músicos. Comenzaron con Cascade, material más reciente de su álbum Lion.

Esta fecha sería muy especial, puesto que Peter Murphy acomodó estas presentaciones, tituladas Stripped, y nos mostraría su lado más íntimo. Un set acompañado de guitarra y bajo principalmente, pero que a veces era sustituido por un violín y otras más acompañaba un sintetizador.

Le siguieron Secret e Indigo Eyes. Esta última siendo más coreada por el público. Peter Murphy se tomó el papel muy en serio y se involucraba demasiado con el público. Actuaba (en serio) las canciones, y abría sus brazos como si de un ave se tratara. El escenario con luces de tonos rojos, a veces violetas y otras más de amarillo.

All Night Long y Marlene Dietrich’s Favourite Poem fueron recitados. Nuevamente la gente acompañó con breves coros. Preferían observar y conectar con lo que sucedía sobre el escenario. Querían formar parte de una historia.

Como se esperaba, Peter Murphy siguió con un tributo a David Bowie, fallecimiento que aún se siente fresco y doloroso entre sus seguidores. The Bewlay Brothers fue el tema que Murphy seleccionó para esta ocasión y fue bien recibida por el público.

Siguió una apabullante selección de canciones que subieron un poco más de intensidad. Strange Kind of Love que remató con un fragmento de Bela Lugosi’s Dead y que hizo ovacionar a todos los asistentes.

The Rose fue exquisita. Y luego algo de Bauhaus porque recordar es volver a vivir: King Volcano y Kingdoms Coming retumbaron en todo el recinto. La voz a Peter Murphy, a pesar de llegar casi a los 60 años sigue igual de potente que en sus inicios. Eso es amor al arte.

Silent Hedges y Never Fall Out fueron cerrando la noche para que rápidamente saliera Peter Murphy y compañía del escenario en un encore.

A su regreso fuimos sorprendidos por la ejecución de Lust For Life, canción interpretada originalmente por Iggy Pop; Fall With Your Knife y la hipnotizante The Three Shadows (Part 1 & 2).

Hollow Hills nos mantuvo atentos a un gran cierre, pero repentinamente se despidió Peter Murphy arrojando el micrófono y saliendo del escenario. ¿Las razones? No sabemos. Quizá estaba muy cansado, o le caímos mal o se sentía mal.

Lo que sí sabemos es que en el setlist estaba previsto que tocaría Cuts You Up y un puñado más de canciones, pero todo indica que dependía del estado de ánimo del señor Peter Murphy.

Como sea, la noche fue muy especial, única por los arreglos en las piezas para realizar un set electro-acústico y que quizá no se volverá a repetir. Afortunados fuimos de presenciar este lado íntimo de Peter Murphy.

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