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TR/ST fue todo un fenómeno en la Semana Indie Rocks, ya pues agotó las entradas y se abrió una presentación más para el mismo día.

He de confesar que era un completo ignaro con TR/ST. Primero supe que su nombre se pronuncia como trust y después me enteré que recogían el sonido dark wave y ondas synth pop que tanto conquistó las pistas de baile en los ochenta.

La oportunidad se me presentó cuando me ofrecieron cubrir el evento y acepté inmediatamente, sobretodo porque tenía bastante curiosidad por ver un show de la Semana Indie Rocks que tenía las localidades agotadas.

En entrevista con uno de los organizadores de este evento, que celebra el aniversario de Indie Rocks!, confesó estar sorprendido por la rápida venta de boletos para TR/ST. Tanto fue el éxito que se abrió una presentación extra el mismo día, pero con unas horas de anticipación.

A mí se me asignó el evento original, el que ocurriría a partir de las 9 de la noche, pero se aplazó a las 11:15 de la noche para dar tiempo de retirar a los de la primera presentación y limpiar el venue.

Para fortuna de nuestro turno, la lluvia hizo de las suyas horas antes, así que solo nos tocó los estragos del agua en las calles. Encharcamiento, humedad y clima frío, lo cual fue perfecto para el cálido show que veríamos a continuación.

A diferencia de otras fechas de la Semana Indie Rocks, en esta ocasión no hubo telonero. Las puertas se abrieron minutos antes y podías disfrutar de una bebida, conocer las activaciones o platicar con tus amigos.

El calentamiento sonoro corría a cargo de algunas piezas electrónicas que salían de las bocinas. Muy discretas, para mantenernos enfocados en lo que estábamos a punto de ver.

Por fin, a la hora indicada salió Robert Alfons, quien fue acompañado por una batería y el show comenzó, llenando la parte interior del venue de personas deseosas de bailar.

El sonido era impecable, disfrutando de los sintetizadores y la batería mientras la voz era clara y fuerte. Así que ya superada esta parte importante, todos nos entregamos al baile y la fiesta.

TR/ST suena muy bien en vivo y su frontman sabe conectar con el público. Nos dio un poquito de varios sonidos que fueron bien recibidos. De repente techno y luego acid house, luego sonidos ochenteros y vamos de regreso.

El ambiente era oscuro, darky dirían algunos. Aunque entre el público había estilos de todo tipo, en general parecía una fiesta ochentera.

El setlist fue dominado por lo más reciente de este proyecto. Sonaron canciones de The Destroyer (2019), sin descuidar cortes pasados de Joyland (2014) y su homónimo TRST (2012).

Ahí entendí el culto hacia banda y su sold out. Su presentación en vivo es todo un performance que incluye la parte sonora y los movimientos de Robert Alfons.

Bien pensado para Indie Rocks!, realizando una curaduría bien analizada y organizada para traernos shows de gran calidad como lo fue TR/ST en la Semana Indie Rocks!

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