Decir que tienes habilidades o conocimientos cuando en realidad no lo es, te puede convertir en un charlatán.
El mundo quedó cautivado con los Beatles y The Rolling Stones. 20 años más tarde se vino otra oleada donde la ciudad de Manchester fue el ojo del huracán.
Bandas como The Smiths y Joy División dominaban el panorama musical citadino. El club The Haçienda era E-L lugar obligado para presentarse en vivo.
En pleno apogeo, el club sufriría una transformación. Pasó de sala de conciertos marcada por guitarrazos a escenario para pinchadiscos.
La mezcla de artistas que tocaban en vivo Rock y Funk, a la par de eventos con disc jockey, dio pie al movimiento Madchester. Un sonido que envió a la fama a los Stone Roses y Happy Mondays.
Durante muchos años, a The Charlatans se les vio como los herederos del Madchester. Sin miramientos agregaron ritmos bailables con un órgano Hammond psicodélico de textura sesentera.
Al paso del tiempo la ola se iba haciendo espuma hasta casi desaparecer en la arena, o al menos así se creía.
La subida del Brit Pop, el empuje del Dance y Techno underground, The Charlatans ni se despeinaron y mantuvieron nivel con su cuarto disco en 1995.
El alcohol y la velocidad cobrarían la vida de Rob Collins. El BMW 520i salió del camino, y el cuerpo del tecladista atravesaría el capacete. Un 22 de julio, antes de concluir grabaciones del álbum sucesor The Charlatans.
Telling Stories (1997) debutó en el primer peldaño. Y para ese entonces la banda se había convertido en los consentidos para cada británico de la década.
Arrestos, sentencias, y hechos enmarañados, son las razones por las que Estados Unidos nos permitió la entrada. Cortando así su desarrollo en ese mercado.
A decir verdad no todos sus discos fueron buenos. Críticas mezcladas entre fanatismo y un sabor efímero de temas acompañaron su inadvertido paso en el gusto popular.
Se sabe de sobra que los años y los golpes de la propia vida te hacen madurar. Incluso cambiar. La época trae nuevos colores y frecuencias. Así le ocurrió a The Charlatans en sus discos.
Las pérdidas para los hijos del sonido Madchester son un camino de aprendizaje relatado en sus letras.
Tener en nuestra ciudad a The Charlatans es un viaje por el tiempo. Un coqueteo con distintas corrientes musicales. No estoy seguro de llamarles leyenda, pero sí son parte de una historia que sigue teniendo capítulos.
Cumplen 29 años de carrera. Muchos se han quedado en el camino, y su consistencia vale oro.
Different Days es un disco alegre y que en el fondo puedes encontrar melancolía. Las guitarras son claras y cuenta con melodías divertidas.
Con un gran número de seguidores, distintas generaciones, el Plaza Condesa recibe a The Charlatans el miércoles 19 de septiembre.
The Charlatans
Fecha: Miércoles, 19 septiembre
Hora: 21:00
Lugar: El Plaza Condesa
Boletos: Ticketmaster
Precios:
- Pista y Discapacitados: $480
- Palco y Salas: $550
- Balcón: $620
