La noche del 27 de marzo, la colonia Roma sería participe de una ceremonia psicodélica, a cargo de Psychic Ills, donde el renacimiento del ser, era el objetivo principal.
La historia nos remonta a 1960 cuando la cultura sufría un sinfín de cambios. Naciones enteras lograrían independizarse, se establecían nuevas estructuras políticas y nuevos movimientos artísticos emergían. Uno de los más importantes, era motivado por la necesidad de una liberación mental a través de ondas musicales que provocaran sensaciones similares a los efectos de algún psicotrópico: el rock psicodélico.
Este suceso trajo grandes aportes a la memoria musical, muchas bandas dejaron su huella para la posteridad: Pink Floyd, The Byrds, The Velvet Underground, por mencionar algunas. Hoy día, estas atesoran la discografía referencial de algunos talentos que buscan crecer con su concepto de la mano.
Psychic Ills es una de ellas, quienes influenciados por las enseñanzas de sus antepasados han manufacturado 5 álbums de estudio y 4 EPs. Banda totalmente con tonos naturales y artesanales formada Tres Warren (voz/guitarra) y Elizabeth Hart (voz/bajo).
EL pasado martes 27 de marzo aterrizaron desde la ciudad de Nueva York para demostrar que han aprendido de manera eficiente y que experimentar con el pasado, impregnándole toques contemporáneos, es una buena forma alcanzar los objetivos de un proyecto en desarrollo.
Desde las 8:30 pm el lobby del Foro Indie Rocks! recibía a la fanaticada, la cual, fue atraída bajo la premisa de un viaje al multiverso de la conciencia y desentrañar la verdad absoluta acerca del propósito de la vida.
Cuando el reloj marco las 9:00 pm las bandas teloneras hicieron su trabajo sin ningún problema. Prepararon el escenario mimetizando cada elemento de menor a mayor para que la energía fluyera en forma positiva, esparciéndola por todo el recinto. The Volture, agrupación encabezada por Maurizio Terracina, fue la responsable de sellar la primera fase del ritual.
La luna realizaba su rutina diaria, hasta llegar a las 10:50 pm, entonces Tres Warren salió para dar inicio a la segunda parte de la ceremonia. Un sonido tenue armonizaba los primeros minutos, las cabezas de los asistentes se agitaban suavemente como símbolo de bienvenida.
Elizabeth Hart danzaba hipnóticamente para conquistar a un público sediento de liberación. El Indie Rocks asemejaba simbólicamente a un microcosmos perfecto para la meditación, el lugar aglutinaba consistentemente los pensamientos de la afición que eran trasmitidos con precisión a la banda y viceversa.
Psychic Ills arribó a México para separar lo mítico de la realidad; utilizó el reducido espacio del venue como herramienta para facilitar la comunicación, permitió que algunas bandas alzaran su voz, reconociendo el agotador esfuerzo para sobresalir. Pero sobre todo, demostró que no hace falta ser un sabio anciano de largas barbas, cliché que caracteriza al rock psicodélico, para convertirse en maestros culinarios de esta bella profesión, que las únicas herramientas que necesitan son el talento, el trabajo duro y una muy amplia visión hacia el futuro.
Después de esta presentación no sería sorpresa si los encontráramos a Psychic Ills en un lineup de algún festival mexicano. Deseándoles el mejor de los éxitos y que esos 15 años de carrera se multipliquen 4 veces.
¿Y a ti, te gustaría renacer?
