En entrevista con C. Tangana, descubrimos cómo su plan de usar a la industria le ha funcionado de maravilla.
Si conoces de cultura urbana, sabes quién es C. Tangana. Su verdadero nombre es Antón Álvarez y lleva más de una década en la música, pero fue hasta el año pasado que una importante radiodifusora de su natal España, le concedió el título de “artista revelación”.
Claro que el reconocimiento no fue generación espontánea: la pieza fundamental de su nueva fama es haber dejado la independencia para firmar “el contrato más caro de to’ el gremio” con Sony Music y así publicar Ídolo, su primer placa con una trasnacional.
En plática con Bizarro FM, abordó temáticas de su disco, pronosticó el futuro del género urbano, y enlistó pros y contras de la popularidad…, pero antes de navegar en las profundidades de su mente, se la tuvimos que cantar:
Dicen las malas lenguas que eres el acto sorpresa de Ceremonia, ¿qué puedes decir al respecto?
Pues son rumores, má’ que na´.
Comenzamos con esto porque su base de seguidores en México es enorme y seguro disfrutaría verlo repetir en el festival. Cabe mencionar que C. Tangana es de los exponentes que sube de nivel cada que viene a dar show. En 2016 fue de Ceremonia al Caradura, y este sábado dará el salto del Lunario a El Plaza Condesa.
En general disfruto la sensación del público en todos los conciertos. Te llevan al límite de lo que creías que podían hacer, pero llegas a México y lo doblan. Así que si te gusta C. Tangana tienes que ir a un directo suyo, porque la cosa cambia. La cosa cambia.
La invitación está hecha, y al notar el cariño de Antón por nuestro país, la verdad sí dan ganas de pagar por verlo: Muchas de mis experiencias internacionales más importantes son en México, las primeras buenas sensaciones de tocar fuera de España son ahí. Es el único país del mundo, sobre todo Guadalajara, Monterrey y Ciudad de México, donde me he sentido como si estuviera en un sitio que reconozco, ¿sabes?, como si tuviera un hogar y una familia allí.
¿Vendrías a vivir acá?
Puede que sí, podría vivir ahí, desde luego.
Si México y España tienen algo en común, es que son muy criticones cuando alguien se vuelve exitoso, ¿apoco no? Con Ídolo, C. Tangana llegó a las listas de popularidad pero a su vez experimentó rechazo, sobre todo de la prensa musical y los puristas del rap: Yo no necesito el reconocimiento de gente que está escribiendo ahí en las redacciones. Para mí que un artista como A. Chal diga “hey, me gusta lo que haces, quiero colaborar contigo”, es muchísimo más importante que (los comentarios de) un bloguero cabreado porque ahora tengo más éxito que antes o porque me he colado en la radio.
Me han dado palos a la salida del disco, cuando Mala Mujer fue un boom, decían como “esto no puede ser bueno porque está teniendo mucho éxito”, pero luego cuando han llegado todos los listados, la mayoría de medios que me habían criticado me incluyeron como uno de los mejores discos del año.
Hablando de Mala Mujer, una prueba de tu éxito fue el remix que le hizo Farruko y French Montana, ¿cómo se logró esta colaboración?
Eso es una oportunidad que surgió gracias a que el tema ha sido internacional. Dio la posibilidad de que haya nombres como esos colaborando en un remix.
Sí son grandes nombres, ¿hay alguien más que te gustaría en tu lista de colaboraciones?
No tengo prisa con eso. Sé que la mayoría de artistas, sobre todo en el género urbano, intentan como juntarse a otros artistas que tienen más éxito para crecer rápido, pero ese no es mi camino. O sea me interesan otros artistas y estoy buscando colaboraciones pero no es como mi primer objetivo, ¿sabes? Mi primer objetivo es mi propia música y hacer lo que a mi me gusta. Y ya está, y si tiene que llegar alguna gran colaboración pues llegará y si no, pues no. No hay una obsesión con eso.
¿Sientes que estás en el limbo entre que ya no eres bien visto por los independientes pero los comerciales tampoco te aceptan del todo?
Sí, totalmente. Pero creo que es el lugar que me corresponde porque seguiré haciendo mucha música que no aspira a los circuitos comerciales del todo: una música más personal y que no tiene por qué llegar al público masivo.
Los artistas de hoy en día del mainstream no se permiten eso. Quizá en Estados Unidos sí, en América sí que hay artistas que compaginan su parte más personal y alternativa con grandes éxitos, pero parece que los hispanohablantes no. Quieren éxito y éxito y hacen discos de singles, y todo el rato están con el último sonido que haya triunfado.
Ese no es mi camino, yo creo que siempre voy a estar ahí con un pie en cada lado y haciendo música alternativa y con gente más minoritaria. Lo que pasa es que sí, claro, tengo la capacidad de hacer música de baile, música que se puede pinchar en la radio, música que le puede gustar a un espectro de personas, porque a mí me gusta todo, abarcar el abanico completo.
O sea que si te pidieran hacer el nuevo hit millennial, ¿podrías?
No, a mí nadie me dice nada. En el momento en el que salga una persona que me diga lo que tengo que hacer, recapacito y adiós. A mí nadie me dice lo que tengo hacer, tal vez mi madre cuando era pequeño y ya *risas*.
¿Entonces cuál dirías que fue la evolución al firmar con una disquera?
Creo que ahora mismo paso por un momento importante, en el que estoy aprendiendo a manejarme dentro de la industria a gran nivel. Aprovecho lo que me puede dar para hacer lo que yo quiero y poder llegar cada día más lejos. Creo que ese es mi reto ahora y diría que esa sería la máxima evolución, conseguir hacer algo interesante para mí con los medios que me puede proporcionar la industria.
Su respuesta me recordó a lo que dijo Residente con Calle 13 en Calma Pueblo (tema extraído del disco Entren los que quieran, coincidentemente publicado por Sony Music): Adidas no me usa, yo estoy usando Adidas. ¿Recuerdan? Lo relaciono porque es claro que C .Tangana no tiene intención de volverse el nuevo “ídolo” comercial. Lo que sí busca es sacarle todo el jugo a esta etapa porque si le ponen atención a las letras de Ídolo –más allá de los ritmos-, se mueve entre mensajes de cómo lidiar con la fama y las desventajas que conlleva. Aunque claro, también exacerba el sexo, las fiestas y sí, el ego.
Lo curioso del disco es que están hablando de eso. Hay gente que lo ve claramente y le gusta, hay gente que no lo ve, hay de todo. Ha dado mucho de qué hablar y eso me parece más importante que cualquier otra cosa, porque uno como artista puede tener una idea en la cabeza y puede querer hacer algo, pero si lo que saca no genera nada, da igual la idea que tuvieses. Lo importante es que el resultado final, sea algo que conmueva y que la gente se sorprenda, que se queje, que lo acepte, que lo ame, que remueva.
¿Cómo equilibras todo, qué tanto es C. Tangana como personaje y qué tanto Antón como persona?
Todo es Antón y todo es C. Tangana en el sentido de que yo soy un artista y como artista tengo que estar interpretando todo el rato. ¿Por qué yo voy a interpretar a un personaje que alguien me enseña o interpretar cosas que están fuera de mí? Mejor me interpreto a mí mismo y convierto mi vida en mi obra.
Finalmente, ¿cuál es el destino del género urbano este año?
Creo que va a seguir por el mismo camino, es el camino que le toca, es lo que hay. Lo que eran los rockeros, ahora son los artistas de música urbana. Es el nuevo pop, es la cultura popular, a lo que todo el mundo tiene acceso y que maneja los códigos que pueden remover a la mayoría. Creo que eso es la cultura urbana.
Quickies:
¿Qué escogerías entre…?
Biggie Smalls o Tupac
Ufffff, dependiendo. Hoy Tupac, pero probablemente mañana Biggie.
Underground o mainstream
Si tuviese que elegir una, underground.
J Balvin o Maluma
J Balvin.
Amor o sexo
Uffff, amor con sexo, ¿no?