Publicidad

En una noche llena de música y baile, en esta ocasión Los Victorios fueron los encargados de hacer corear a un Teatro Metropólitan totalmente lleno y que volvió a abrir sus puertas para el ska como se ha hecho una costumbre en esta época donde los espacios para tocar se han visto reducidos.

Por: Eric Cedeño

En punto de las 9 al ritmo de Satanas Swing empezó la noche. Mientras El Chino y compañía, enfundados en sacos blancos al estilo Big Band comenzaban a calentar el escenario.

Comenzó el desfile de canciones, desde aquellas que sonaban en el Locos & Rucas in Retro (1999) como La noche estaba puesta, Nasty uncle hippie, Mil coyotes marihuanos, pasando por el Popis Hits Yeye Beats (2001) con Si tu boquita fuera, dando un recorrido en el secundario del 73 (2003) con La caída y la gloria y Mi vida es tango, recordando el Insalonia (2009) con Yo estoy bien y continuando con el recorrido Victorioso con rolas como La reina y el paria, Me voy, No te olvidé, Impermeable, El peor momento, La medicina y otro tanto más de sus discos 1 y 2 (2012 | 2014) que hicieron del lugar un verdadero salón de baile.

Con un espectáculo visual lleno de colores, el Metropólitan no dejó de cantar una sola canción mientras los minutos corrían y la banda se veía cada vez más alegre y disfrutando cada rola al máximo.

Y como se ha hecho costumbre, llegó el momento donde agradecieron a todos aquellos que ayudaron en el sismo del 19 de septiembre y en esta oportunidad cada uno de los integrantes se vistió representando la diversidad de personas que estuvieron al pie del cañón para salir de esta desgracia, desde un taquero, un futbolista, un mariachi, un joven de secundaria y un rescatista.

En una de las mejores ejecuciones por parte de la banda, la gente quedó satisfecha pero sin un completo sabor de boca, el característico grito de ¡¡¡Otra, Otra!!! No se hizo esperar pero desafortunadamente para los ahí presentes no hubo oportunidad de más canciones y quedaron en espera de escuchar canciones como Palabras, Manifiesto del pingüino asesino, Toro y Torero y la más aclamada por la audiencia Maldita Soledad.

De esta manera se confirma la fuerza que está tomando el ska nacional y la oportunidad que están dando los venues para que las bandas se presenten y sigan difundiendo su música.

Victorios con 5 años en el circuito del ska, pero con más de 20 años de experiencia dentro del mismo esperemos pronto nos estén dando una sorpresa para volver a baialar el “Swing y el ska” de éstos locos por la música.

Deja tu comentario: