Publicidad

Han pasado varias semanas ya desde su partida y todavía estamos buscando la forma de vivir un mundo sin Leonard Cohen. Sin esas lecciones de vida musicalizadas tenuemente y que se esfumaron este noviembre.

leonard cohenAlgo es cierto, Cohen nos dejó un regalo antes de emprender el viaje infinito y agradecemos mucho que su última pieza haya alcanzado a salir este año, el mismo que pareciera no tener gusto musical y que ha sido muy egoísta con los amantes de las notas y los ritmos.

You Want It Darker tiene por título y muestra en su portada la figura de un hombre que no le debe algo a la vida, uno seguro y a la altura de su legado. Nos atrevimos a inundarnos de él para contarles nuestra experiencia. Esto sucedió…

El 90% de lo que decimos se mide en el tono, es un sujeto tan poderoso que puede cambiar la intención en un instante y desatar extremos si de socializar hablamos. El utilizarlo sabiamente se vuelve entonces un arte que exige la perfección con el paso de los años, más en esta época en la que los dedos deciden tomar el lugar de la boca y expresar (erróneamente) lo que realmente sentimos.

Leonard Cohen es de esos pocos que perfeccionaron la técnica del tono, utiliza el qué y el cómo de una manera inusual y transmite exactamente lo que se debe, es por esto que no se puede hablar de él sin usar un tono de respeto y admiración hacia una silueta que trascenderá en esto que llamamos música.

Cohen siempre ha optado por escribirle a la vida, al amor y a las inconveniencias de ser sensible en un mundo lleno de opuestos, esto ha logrado que de sus manos salgan poemas contemporáneos que sólo requieren un poco de acompañamiento para darle forma a un estilo único y muy satisfactorio. You Want It Darker se siente así, un libro musicalizado que cuenta distintas anécdotas y que refleja a un hombre de talla grande tanto en calidad como en años.

El primer track se siente sombrío, una despedida anunciada que utiliza un acompañamiento grave para ayudar al argumento, una crítica al cómo se vive hoy día y con un I’m ready, my lord que cierra por completo las intenciones. Le sigue Treaty, una hermosa pieza llena de lecciones al aire que debemos escuchar con atención y absorber lo que podamos. Se siente el testamento transformado en melodía, y es que casi todo el disco tiene una atmósfera de adiós, se dice que Leonard Cohen estaba listo para morir y parece ser que utilizó este último disco para despedirse, no sin antes dejarnos algunos últimos consejos que nos acompañarán a partir de ahora.

No dejemos de lado el hecho de que muchas de sus canciones tienden a esta temática y, particularmente, algunas de este álbum se han cocinado desde hace varios años, pero el compilado y selección de You Want It Darker nos hace pensar que fue la intención total de Cohen por dar sus últimas palabras, una vez más todo es cuestión de tono. Leaving The Table y If I Didn’t Have Your Love transmiten a un hombre que recuerda, que viaja al pasado y rescata lo mejor de él reflejado en su pareja, sin duda tracks que moverán las fibras de más de uno.

Reflexión e introspección se sienten en Travelling Light, It Seemed The Better Way y Steer Your Way. Un Cohen listo y sin miramientos, se nota que el álbum está repleto de sentimientos muy personales y que fue hecho no con intención de agradar a un auditorio, sino con la libertad que se puede dar un artista consumado de poner lo que realmente quiere y hacerlo de la misma forma.

Con la instrumentación de Treaty se despiden los 9 tracks que cierran la puerta al sonido de Leonard Cohen, un artista que influyó en muchas almas y que seguramente recordaremos por largo tiempo. You Want It Darker funciona de manera ejemplar para un día lluvioso o simplemente para cuando tengas la necesidad de recordar, de reflexionar sobre los actos y de que un tono adecuado te sirva para afrontar lo que sigue. Gracias por tantos años de lecciones y de un estilo sin igual. Gracias Leonard Cohen.

 

 

 

 

 

Deja tu comentario:
REVIEW OVERVIEW
Calificación
you-want-it-darker-leonard-cohenYou Want It Darker es un viaje al pasado de un artista emblemático dentro de la industria, una despedida en forma de poemas sacados de la vida misma y que te darán la posibilidad de disfrutar, por última vez, un talento de los que ya no hay. Entre coros y atmósferas sombrías te envolverá en una experiencia reflexiva que agradecerás por largo tiempo. Cohen se va, no sin antes mostrarnos su más puro estilo.