Tuvimos a Barrio Chachín en entrevista para Bizarro. Carlos Escamilla (bajo) y Óscar Martín del Campo (percusiones) nos contaron sobre su nuevo material Nosotros Somos el Resto y hacia donde van.
¿Cómo se forma Barrio Chachín?
Óscar: Nosotros somos de Monterrey, somos de allá. Nos conocemos desde hace mucho tiempo. El voaclista estábamos en la prepa juntos, tocábamos juntos en una banda que se llamaba Freddies y de ahí se fue modificando la alineación hasta formar Barrio Chachín y ahora estamos promocionando este segundo disco.
¿A qué suena Barrio Chachín?
Óscar: Definirnos con un sonido está muy difícil, los dos discos son muy eclécticos y tiene mucha variedad a ritmos y sonidos, nos gusta agarrar de todos lados. No nos encasillamos en un solo género musical. No nos gusta ponernos un techo.
¿Hay una diferencia sustancial entre su primer disco y éste segundo?
Óscar: Sí, porque nuestro primer disco es más amoroso y meloso y este disco ya trae más contenido social. No llegando a la crítica como Molotov para mentarle la madre a los políticos, pero sí más como un sentido de conciencia. También hay unas canciones de amor.
Ya vimos que las líricas cambiaron, ¿y el sonido, el estilo musical también?
Óscar: Cambio porque hemos seguido experimentando con muchos más ritmos. El disco pasado tenía un tango, un bolero y un cha cha cha. Ahora tenemos por ahí un funk, una baladita, una cumbia. Sí cambia el sonido porque son géneros distintos. La magia del disco es que te lleva de abajo para arriba. Hicimos un disco conceptual.
¿Qué influencias tienen para basarse en su sonido?
Óscar: Este disco tiene mucha influencia de grupos populares gringos, así con mucha influencia de Café Tacuba, Calle 13, Caifanes, Red Hot Chilli Peppers, Radiohead. Es de lo que escuchamos todos y el momento en que nos fuimos a vivir juntos se amalgamó todas nuestras influencias. Porque en el disco pasado cada quien estaba en su casa, con sus papás, ensayábamos los domingos. Ahora componemos juntos. Cuando llegamos aquí al DF llegamos sin conocer a nadie y durante dos meses estuvimos encerrados sin TV, Internet ni nada. Ese tiempo lo usamos para componer.
¿Actualmente escuchan algo que digan: esto me gusta muchísimo?
Carlos Escamilla: Ahorita, el Multi Viral de Calle 13 fue un pinche trancazo cabrón.
Óscar: El nuevo disco de Jack White está muy, muy, muy cabrón. Es de mis discos preferidos.
¿Lo van a ir a ver al Corona?
Óscar: Estoy en un dilema porque un día toca él y un día toca Kings of Leon, son mis ídolos desde que nacía. Ya sería mi tercera vez que los veo.
¿Siguen asistiendo a conciertos?
Óscar: Sí, sí. Hemos ido a todos los Vive Latino desde que llegamos.
¿Han visto alguna presentación que los haya impactado?
Óscar: La reunión de Caifanes en un cierre del Vive Latino fue de las cosas más cabronas que me ha tocado vivir. La gente estaba loca, estaba abarrotado el Foro Sol y había una nube de humo arriba de todo, jajaja.
Carlos: El Vive pasado lo que hizo Zoé de revistar lo que ya tenía y hacerlo más sintético me latió como lo armaron.
Veo que tienen su nuevo álbum en iTunes y formato físico, ¿qué opinan que ahora la tendencia va a lo digital?
Óscar: Todos estamos en el mismo canal. Ahora las bandas independientes ya no buscamos que salga dinero de los discos, sino que escuchen tu proyecto, en lo personal a nosotros no nos molesta. Si quieren apoyarnos y comparlo en iTunes está chido. El formato físico se venderá en los eventos con una cooperación voluntaria. Que el público le ponga el precio y si no traen varo se lo regalamos igual.
Carlos: Ahorita el negocio de la música está en las presentaciones. El negocio está en las taquillas.
¿Les gusta más componer o dar presentaciones?
Carlos: Es una cosa con otra. Cuando vas y ves bandas que son buenas es un gran estímulo y es crítica. Desafortunadamente uno no se escucha abajo del escenario. Hay veces que nos toca tocar y uno se siente así de “no mames, no sonó” y te bajas y el público te dice “sonaron bien cabrón”. Es una cosa con otra. Vas a y ves bandas, te gustan. Más o menos te imaginas como quieres sonar tú. En cuanto a la composición es parte del trabajo. Ahorita fue más de un año de estar haciendo el disco, ensayando, ir al estudio, hacer ideas. Sí fue complicado combinarlo con el trabajo. Este año ya es de puro tocar.
Ya tienen 3 años viviendo aquí en el DF, ¿por qué decidieron venirse para acá? ¿Qué diferencia hay?
Carlos: En Monterrey ahorita está resurgiendo bien. De hecho hay muchos festivales que están saliendo: Pa’l Norte, Machaca Fest, Monterrey Music Festival, Hellow Fest. El detalle es que cuando nos venimos para acá la escena había desaparecido. Había una ola de violencia en Monterrey, ya conocemos toda esa onda. La gente no salía, no iba a los foros. Entonces era esperarnos a ver qué pasaba o venirnos a la Capital. Siempre despegan de aquí.
Las bandas de provincia nunca he escuchado que me diga, con excepción de la avanzada regia que sí fue desde Monterrey y sí dijeron “vámonos contra todo México, con excepción de eso siempre he escuchado que vienen aquí y despegan. Podemos incluir a bandas latinoamericanas como Los Bunkers, que están aquí en el DF, no sé si todavía vivan pero aquí despegaron.
Ahorita ya nos está yendo bien. Hay gente que al ver que nos jalamos para acá nos toman más en serio. Hace poco estábamos hablando con una persona que se dedica a esto, a organizar eventos y dice que sí, que ellos miden la seriedad de las bandas con eso, qué tanto están haciendo con su proyecto. Dice que hay proyectos que salen y que se desintegran. Que los buscas meses después y ya no existen.
¿Conocen alguna otra banda que ande en crecimiento y desarrollo como ustedes?
Carlos: Tenemos una banda amiga que se llama Tralali Lalá con quien estamos compartiendo gira. Es una banda de trip hop y van encaminada haciendo promo y buscando espacios. Es una banda buena y nos encanta compartir escenario con ellos. Yo creo que sí nos complementa y nosotros a ellos también.
¿El futuro de Barrio Chachín?
Óscar: Nos gustaría llegar lo más lejos que se pueda y estamos trabajando muy duro para conseguirlo. No queremos fijarnos como un tope de la banda. Queremos seguir trabajando y ver cómo la gente está respondiendo.
La pregunta obligada: ¿Qué es lo más bizarro que les ha pasado?
Óscar: Aquella vez que vinimos de gira aquí a México y tocamos en El Chopo. Llegamos y resultaba que era un festival de metal en el Chopo (risas). Sí de por sí es muy under, gótico, metalero y llegamos y empezamos a ver que todas las bandas eran metaleros y puro metalero en el público y cuando tocamos nos empezaron a gritar “pinches fresas” y el presentador nos presenta como una banda de rock pop. Ya te imaginarás, nos empezaron a aventar de todo al grado de que el organizador se tuvo que parar frente a todos y gritarles: “A ver cabrones, tranquilos. El Chopo se caracteriza por tener mucha diversidad, no pueden hacer eso“. Entonces ya la banda se calmó y nosotros terminamos de tocar con nulos aplausos. Estuvo chido como experiencia y es lo más bizarro que nos ha tocado.
¿Quieres verlos?
Sígue sus próximas fechas:
16 de agosto – Orange Live, León 22 de agosto – Pasagüero, DF 30 de agosto – Bar Xipe, DF 5 de septiembre – Rockabilly Bar, San Luis Potosí 13 de septiembre – Club Atlántico, DF 20 de septiembre – Foro Magdalena, DF 26 de septiembre – La Encrucijada Rock House, Querétaro 4 de octubre – Café Iguana, Monterrey
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