Atmósferas nostálgicas y de ensoñación que nos ponen bailar: esto nos trajo Glass Spells el pasado 25 de febrero en la Sala B del Foro Indie Rocks. Aquí la reseña Glass Spells en México.
La banda de synth pop, formada en San Diego, California, dio su tan ansiado primer concierto en la Ciudad de México. Aquella fue una noche de dúos que ofrecieron ritmos oscilantes entre dark y synth wave, hipnotizándonos con secuenciadores, sintetizadores y percusiones electrónicas.
Una coincidencia era notoria desde que vimos el flyer: dos bandas latinoamericanas dedicadas a estilos musicales cercanos y con nombres casi idénticos abrirían el escenario. Cada una ofreció un set de cuarenta minutos para deleitarnos con su material oscuro y bailable. Así se presentaron Sexes y Sexores, cada una conformada por un dúo que supo preparar un público que poco a poco crecía.
Sexes, banda mexicana de pop con toques dark wave y shoe gaze, fueron los primeros en presentarse. El dúo conformado por Parrillat y Ra, activos desde 2017, lanzaba una potente sensación onírica que se mantendría por todo el concierto. La voz femenina, dulce y de frecuencias bajas a la post-punk, recuerda esa voz nostálgica de Molly Nilsson.
Sexores, originarios de Ecuador, banda con un amplio trabajo y trayectoria desde 2010, se presentó en esta ocasión con su dúo original: Emilia Bahamonde y David Yépez. La voz y guitarra de Emilia creaba las atmósferas íntimas, casi táctiles, mientras David, energético, lanzaba snares secos, rides hiperbrillantes y un bombo poderoso directo al pecho del público, que bailaba a ritmo lento.
La noche se llenaba de atmósferas dream pop. En estas bandas se hizo notorio el diálogo con los ambientes etéreos de Cocteau Twins; voces reminiscencias a Julee Cruise; bajo continuos y agresivos a la Boy Harsher.
Hubo un intermedio. El público terminó de llenar la sala. Inesperadamente, un bajo repetitivo y grave impactó nuestros oídos. Tania Costello y Anthony Ramírez fueron recibidos con gritos y aplausos: Glass Spells estaba en escena. Aunque las bandas de apertura supieron calentar los motores, la energía de los Spells se hizo notar. El evento comenzó con Mirrors, uno de los primeros sencillos de la banda y un clásico para los fans, que con su coro incitó al público a algo tan sencillo y poderoso: wake up now. La energía de Glass Spells impactó como reflejo directamente en el Foro Indie Rocks. La banda y el público eran uno.
Tania y Anthony brillaban. Ella, bailaba y cantaba dando saltos entre los destellos de su corset. Él, vestido con camisa a puntos, conducía, con su actitud más apacible pero sin dejar mover la cabeza, las bases que retumbaban en el recinto. El foro lleno entre chamarras de cuero y gritos, y el tiempo pasaba volando entre canciones.
Tania Costello hizo una pausa y habló: «Nací en Guadalajara. A los siete años me fui a vivir a Estados Unidos y esta es mi primera vez tocando en México… esta canción va con mucho amor, se llama Hechizos…» sencillo del 2023, el material sonoro más reciente de la banda, que nos había mantenido a la expectativa desde Shattered, su primer LP del 2021. Hechizos fue coreada por todos. La banda, tan reconocida en Estados Unidos, cantaba en el idioma natal de los músicos, cantan por primera vez en esta ciudad; están en casa.
Es increíble que un género de ambientes bellos y oníricos refleja en sus letras sentimientos melancólicos. Glass Spells lo entiende bien. El sintetizador de Anthony y el rostro de Tania en No One To Trust son la evidencia. Melodía y voz parecían estar a punto de romper a llorar, manteniéndose en pie gracias a un baile encontrado en esas secuencias hipnóticas. Así mismo ocurrió con Fears —que va «sobre una cosita que se llama ansiendad» dijo Tania—, donde culminó uno de los momentos más emotivos de la noche.
Llegaba la última canción. «Esto es Trhills…», el momento más esperado por todos. Glass Spells presentaba como cierre su sencillo más reconocido. El público, completamente suelto, disfrutaba la conclusión del concierto lanzando el grito más fuerte de la noche, mientras se dejaba llevar por el coro irresistible: Looking for you in the night.
Enfrentarse al público mexicano es enfrentarse al inevitable coro de «Otra… otra…» y Glass Spells supieron responder. Dónde el público tal vez pedía algún sencillo de sus primeros años, la banda ofreció una canción inédita, aún sin nombre —incluso en el setlist, que al final regalaron a un afortunado del público, la canción figuraba con el nombre en código “bonus”—. El estreno de esta canción está marcado en la memoria de aquellos que asistieron a su primer concierto en tierras mexicanas, en nadie más.
La primera presentación de Glass Spells en CDMX estuvo marcada por un crescendo ya alto desde el inicio, que culminó en el regalo de una canción inédita y en un meet & great posibilitado por la intimidad del Foro Indie Rocks. Los integrantes de Glass Spells firmaban playeras, viniles y boletos, entre fotografías y videos de los fans. El final de su concierto estuvo anticipado todo el tiempo: la distancia entre artista y público ya había sido rota por la música de Glass Spells.
