Durante la década de los 90 y los 2000 no existía hombre más poderoso en la industria que Harvey Weinstein; su inteligencia, influencia y sagacidad era plenamente conocida en la industria; con su casa productora Miramax y The Weinstein Company llegó un momento en el cual manejo prácticamente toda la industria, teniendo en sus manos a los mejores artistas, directores y guionistas.
No obstante en muchos momentos, varias propuestas que llevaban la marca “Weinstein” no eran precisamente brillantes pero aún así terminaban ganando todos los elogios; un ejemplo claro fue el bizarro drama/histórico/comedia romántica que produjo en 1998 Shakespeare in love de John Madden con Gwyneth Patrow y Joseph Fiennes en los estelares; un producto bastante mediocre que le dio premios de la academia al por mayor; de ahí que su sombra empezó a causar problemas y polémicas.
Al final todos sabemos cómo inicio esa historia; Harvey Weinstein no solo fue culpable de abuso sexual en contra de infinidad de actrices; su poder y abuso de confianza en el mercado cinematográfico quedo expuesto de una forma grosera, pero una película quedó atrapada dentro de esta maraña; The Current War que al final fue rescatada de una forma más que triste algunos años después.
Después de agregar varias escenas extras al proyecto inicial de 2017; nos encontramos a finales del siglo XIX con dos genios de la época moderna, Thomas Edison (Benedict Cumberbatch) y George Westinghouse (Michael Shannon), compiten -éste último haciendo equipo junto a Nikolai Tesla (Nicholas Hoult)- para crear un sistema sustentable de electricidad y poder comercializarlo a todos los Estados Unidos en lo que se conoce como la ‘guerra de las corrientes’, una rivalidad entre ambos por el control del incipiente mercado de la generación y distribución de la energía eléctrica.
Dejando la sinopsis de lado; el por que hicimos mucho énfasis a este preludio del poder de Harvey Weinstein es por el tipo de historia con el que nos encontramos; de forma bastante clásica llevada a la gran pantalla pero con unas formas bastante lentas y un tanto desafinadas; si hacemos un ejercicio de imaginación en el que Weinstein no hubiera sido atrapado en sus fechorías, probablemente estaríamos hablando de uno de esos proyectos en los cuales la sociedad de Weinstein hubiera llevado a la cumbre de forma increíble a The Current War.
Lo más triste de esto es que lo único que podemos rescatar del film de Alfonso Gómez-Rejón (American Horror Story) sea este ejercicio de imaginación; ya que ni teniendo un cast de bastante respeto como por ejemplo Michael Shannon y Benedict Cumberbatch pudo elevar en alto este proyecto que se notó bastante forzado como para poder justificar que no quedó el proyecto simplemente arrumbado.
Ni el guión de Michael Mitnick o la fotografía de Chung Chung-hoon fueron suficientes para poder llamar la atención de una producción que tal vez tenga lugar en alguna escuela secundaria o clase de historia para poder explicar a los adolescentes la trascendencia de la “Guerra de las corrientes” en la evolución de la humanidad.
The Current War con Benedict Cumberbatch, Michael Shannon, Nicholas Hoult y Katerine Waterson en los estelares, con la dirección del norteamericano Gómez Rejón no logra aprovechar de fondo el gran contexto histórico y queda solo como una película más de tantas con temas históricos que se realizan por el mero gusto de justificar hechos de la humanidad; lamentablemente puede que pase a la historia pero por ser la última del caído productor Harvey Weinstein.
The Current War
Dirección
Alfonso Gómez-Rejón
Reparto
Benedict Cumberbatch
Michael Shannon
Nicholas Hoult
Katherine Waterston
Tom Holland
Año / País:
2017 / Estados Unidos
Duración
107 min.
Guion
Michael Mitnick
Música
Danny Bensi, Saunder Jurriaans
Fotografía
Chung Chung-hoon
Productora
Bazelevs Production / Film Rites / Fourth Floor Productions / The Weinstein Company / Lantern Entertainment. Distribuida por 101 Studios [USA]. Productor: Martin Scorsese, Timur Bekmambetov
Género
Drama/Biopic