Café Tacvba sabe que llegar al tercer piso no es fácil, por eso dio un recorrido discográfico para más de 60,000 personas en el Foro Sol.
Café Tacvba apareció en un momento en el que la historia de México, y en general de la mayor parte de América Latina, necesitaba un giro de 180 grados en muchos aspectos, desde el político hasta el social. Esta banda llegó para empujar varios ejes a través de sus letras, intentando impactar en los agentes necesarios para que impulsaran aquel cambio.
¿Lo lograron? Es tema para otra redacción, lo que es una realidad, es que lo que empezó en 1989, hoy, es un legado para las identidades artísticas del presente y con certeza del futuro. Son ellos una herencia forzosa para el caminar de la música mexicana y son ellos los que la noche del pasado 7 de diciembre cumplieron tres décadas de trayectoria, así que para celebrar reunieron a sus seguidores en el Foro Sol.
Minutos previos a la presentación oficial, un discurso sobre la violencia a la mujer, acompañado del himno feminista actual, fue el ritual que dio inicio al concierto de los Cafeta.
A las 21:30 h, el telón cayó y, aproximadamente, 60,000 almas quedaron en penumbras. Sonidos que aceleraban el palpitar de los espectadores, salían de instrumentos que solo mentes con experiencia son capaces de conquistar. De pronto, todo se quedó en silencio, pareciera que las ovaciones se sincronizaban con la aparición de cada uno de los personajes que iban a dirigir la ceremonia de aniversario.
Las primeras notas en ser tocadas fueron las de Seguir Siendo, primer tema del álbum Sino (2007), una decisión que se pagó con lágrimas por parte de algunos oyentes.
Las primeras palabras directas de Rubén Albarrán (voz) fueron para anunciar el propósito de la noche:
-“Muchachas, Muchachos, ¡Llegamos a los 30!”
Después de darle la merecida bienvenida a su invitado más preciado: el público, y al grito de ¡Vamos a empezar con las viejitas!, refiriéndose a sus repertorios más antiguos, entonaron Debajo del Mar, Labios de Jaguar y La Zonaja provenientes de su primera producción discográfica de manera formal: Café Tacvba (1992).
Para Ojalá que Llueva Café, invitaron a unos maestros artesanos en el violín: El Duo Huasteco, quienes pusieron a zapatear al Foro Sol al ritmo de las letras que ya están grabadas en el corazón de los mexicanos.
La iluminación no se quedó atrás, los paisajes digitales creaban ecosistemas analógicos de amplio espectro que asemejaban luces espaciales, es decir, estrellas del más celestial candor.
Las Flores, no solo produjo que el vibrar de la audiencia se quedara en la delegación Iztacalco, sino que entró a lo más profundo de los recuerdos de los ahí presentes, incluyendo a Café Tacvba, mismos que, remataron con Chilanga Banda.
Otros de los dignos acompañantes de Café Tacvba, fueron Los Tres, quienes subieron a la tarima para dedicar Amor Violento a los a los seres que abandonaron este plano y ahora gozan de la luz de la eternidad, esto en palabras del vocalista.
Meme (teclados) dio con una cátedra magistral, pues los arreglos de La Chica Banda, lo dejaron lucir las habilidades articulares que le permitieron generar sonidos bidimensionales, que formaron figuras rítmicas de calidad.
Para el primer encore no podía faltar la aparición de Eres y Quiero Ver, canciones que evocaban al sentimiento que puede acabar con las peores pestes de la humanidad: el amor.
Para cerrar no solo el segundo encore, sino todo el festejo, fue elegido uno de temas más escuchados por las generaciones que vieron crecer a la agrupación: La Ingrata, el sello de la casa.
Café Tacvba es equilibrio armónico, uno que crea expectativas al momento de ser mencionados, por ello Rubén Albarrán, Meme, Joselo Rangel (guitarra) y Quique Rangel (bajista), dieron uno de los mejores conciertos del 2019: una vara muy alta que alcanzar.
Si estuviste ahí, cuéntanos como te la pasaste ¿Te gustó?. Si no pudiste asistir ¿Cuál es tu canción favorita de Café Tacvba? Tu opinión en muy importante para nosotros.