ANIMA
Thom Yorke es un tipo que realmente no se mantiene quieto, siempre se mantiene en constante progreso musical y reflejando sus sentires a través de ella.
Es un tipo que se da una vuelta por los beats del futuro y regresa para complementarlos con temas del presente; ya sean políticos (por su desacuerdo con el BREXIT) o sentimientos del propio Yorke como la depresión, el aislamiento, la soledad y los confines de todos estos en conjunción que desde siempre ha reflejado en discos con Radiohead y en solitario.
ANIMA es el nombre de la tercer obra del británico, un disco donde una vez más Thom expone su notable agrado por el IDM y el movimiento Warp, este tipo de electrónica minuciosa y bien trabajada a detalle muy a lo Aphex Twin, Boards Of Canada, etc., que Yorke ha reflejado desde el Kid A con Radiohead.
Las 9 pistas de ANIMA ya estaban sumamente planeadas desde hace años junto a Nigel Godrich, productor de cabecera de Radiohead y de Thom Yorke en solitario. Y es por eso que su grabación “fue fácil y sencilla”, en palabras del músico en una entrevista con Zane Lowe de Beats 1.
Una atmósfera de latidos y ecos nos atrapan en Traffic, el primer corte que da la bienvenida con sus síntesis que van creciendo hasta desvanecerse en claps y coros de Thom Yorke. Traffic muestra el camino de lo que será ANIMA y sus nulos rasgueos de guitarras y baterías en abundancia. Depende de ti el que desees quedarte o sentir la experiencia.
Last I Heard (…He Was Circling the Drain) y Twist son tracks multifacéticos, con demasiadas texturas y un ambient psicodélico que por supuesto van guiados por la voz de Thom Yorke, en el primer caso por susurros y ecos que se van extendiendo durante las subidas y bajadas, y en el segundo caso, por la sutil lírica que se le emplea, a su vez de la grata sintonía de los sonidos por parte de la maquinaria del líder de Radiohead.
Por casi cinco minutos y medio, Thom se dedica a hablar durante Dawn Chorus, que es básicamente un discurso existencial interno musicalizado de manera profunda que no deja de ser interesante, más aún con la conexión inmediata al finalizar con I’m a Very Rude Person y su cambio anímico hacia un bajeo dub y perspectiva más dance. Porque a Thom también le gusta bailar, muy a su manera, pero le gusta. Y este corte definitivamente es bailable.
La conexión de finalización de una rola y comienzo con otra, prosigue con Not The News y The Axe, manteniendo lo experimental a flor de piel y metiéndose más y más hacia el cerebro de una manera encantadora y hermosa.
Se les recomienda escuchar todo el ANIMA con audífonos de buena calidad puestos. Lo van a agradecer, créanme. Sobre todo al comienzo de Impossible Knots y ese bajeo tan dub y tan sexy con un cambio de ritmo espectacular y destacado a mitad de la pista que exalta a bailar al estilo Thom Yorke como en el video oficial de Lotus Flower de Radiohead. Y que de igual manera se puede complementar con Runwayaway que finaliza el álbum con una energía de ambient a su máximo tope.
Acompañado de un corto visual de casi 15 minutos en la plataforma Netflix y dirigido por el cineasta Paul Thomas Anderson, quién también creo visuales para el show en directo de Thom, ANIMA va mucho más allá de ser solo una experiencia auditiva, es rondar por ideas abstractas que nos pueden parecer desconocidas y difíciles, pero a su vez, ideas con las que podemos familiarizar por medio de la reflexión. Un collage de ritmos electrónicos y letras de aislamiento que Thom Yorke ha recapitulado a través de los años tanto con Radiohead como en solitario.
