Kendrick Lamar lanza el video oficial para Squabble Up.
Kendrick Lamar ha lanzado su tan esperado video musical para Squabble Up, extraído de su álbum sorpresivo GNX, lanzado el 22 de noviembre de 2024. Dirigido por Calmatic, el video continúa con la exploración visual rica y simbólica que ha caracterizado el trabajo de Lamar, un referente dentro del rap contemporáneo. Esta nueva entrega no solo ha cautivado a los fanáticos, sino que ha generado un sinfín de comentarios y análisis debido a su profundidad y estilo únicos.
El video comienza con Kendrick Lamar leyendo un libro satírico titulado How to Be More Like Kendrick for Dummies, estableciendo desde el inicio el tono lúdico y a la vez introspectivo que atraviesa todo el tema. Lamar aborda temas complejos como la fama, el poder y la identidad, jugando con la idea de la autoconciencia y las presiones que surgen al estar bajo la mirada pública. Un momento destacado en el video es cuando el artista sostiene un cartel con el mensaje “JESUS SAVES GANGSTERS TOO”, lo que refuerza las referencias religiosas y espirituales que han sido una constante en su música.
Lo que hace que Squabble Up se destaque es que es el primer sencillo de GNX que recibe tratamiento visual, lo que resalta su relevancia cultural. El video rinde homenaje a visuales icónicos del hip-hop, en particular al video de 1999 para The Next Movement de The Roots, lo que no pasa desapercibido para los fanáticos. De hecho, Questlove, el baterista de The Roots, agradeció públicamente a Kendrick Lamar por la mención, reconociendo el impacto que su banda ha tenido en las generaciones más jóvenes. Este gesto se interpreta como un reconocimiento y una reconciliación, dado que GNX se adentra en temas de conflicto y resolución.
La estética del video se caracteriza por el uso de un solitario salón de baile teñido de verde, con una lámpara de araña colgante, lo que le otorga una atmósfera surrealista, algo que ya es habitual en los trabajos visuales de Lamar. Este escenario extraño y evocador crea una atmósfera de introspección y desconexión, reflejando la alienación que a menudo siente el artista dentro de la maquinaria del estrellato. Como es habitual en la carrera de Lamar, los visuales sirven como un complemento de su lírica, brindando capas de significado que invitan a una interpretación profunda y a ver el video varias veces para captar todos sus matices.
El trabajo de producción en Squabble Up destaca por la colaboración con algunos de los mejores productores del momento, como Sounwave y Jack Antonoff. La canción fusiona ritmos experimentales con letras profundamente introspectivas, lo que convierte al tema en algo más que una simple canción; es una declaración artística que refleja la continua exploración de Lamar sobre las luchas personales y sociales. Esta fusión de sonido y visión presenta a Squabble Up como una pieza multifacética que sigue la tradición de la música de Lamar, entregada con la misma intensidad y precisión que sus fanáticos esperan.
A medida que los seguidores continúan analizando GNX y sus visuales acompañantes, queda claro que Kendrick Lamar sigue marcando el estándar para la intersección entre el hip-hop y el arte visual. Con cada nuevo lanzamiento, Lamar no solo desafía las convenciones del rap, sino que empuja los límites del arte en general, capturando y desafiando continuamente a su audiencia.