Silverstein y The Devil Wears Prada volvieron a México para regalar una noche a sus fans que será recordada por siempre
Silverstein y The Devil Wears Prada unieron fuerzas para compartir con sus seguidores mexicanos, su trayectoria , su consolidación y presente como bandas, brindando una noche con mucha intensidad, nostalgia y emociones que se gozaron de principio a fin. Una de las bandas invitadas, fue el talento mexicano, Lack of Remorse fueron los encargados de abrir la noche que fue todo un éxito.
El sábado 12 de agosto, el aún existente público emo, se dio cita para escuchar de dos bandas icónicas del metalcore y post hardcore en Ciudad de México siendo parte parte una noche muy especial en el Frontón México.
Parecía que esa noche se complicaba para todos porque había muchos shows en otros foros, la lluvia estaba constante en la ciudad, el tráfico no ayudaba y a pesar de eso una multitud de seguidores de ambas bandas se congregó para presenciar un espectáculo que había sido esperado durante años y el clima no evitó que los treintones vistieran sus mejores garras, presumiera sus tatuajes y un delineado que ya es habitual desde hace algunos años.
Entre vasos de cerveza, dolor de rodillas, headbanding, la gente empezaba a encontrarse amigos, mientras otros iban al baño aprovechando la espera y otros se formaban para comprar su mercancía oficial.
La noche empezó temprano, para calentar motores en el escenario, la banda mexicana Lack of Remorse hizo su aparición para compartir una buena dosis de su talento y presencia en el escenario. La respuesta de la gente fue positiva , algunos ya conocían a los mexicanos, otros se llevaron una grat sorpresa y al finalizar, la banda agradeció a todos los que se dieron cita temprano y pudieron ser parte de un gran inicio de noche.
Llegó el momento de The Devil Wears Prada, quienes fueron recibidos con muchos aplausos por aquellos que nunca los habían visto y aquellos que los extrañaron después de nueve años de ausencia en el país.
Aunque no todos coreaban los guturales, el headbanding era constante durante su set. Tocaron canciones que muchos esperaban como “Hey John, What’s Your Name Again?”, “Born to Lose”, “Chemical” entre otras, despidiendo el show con un moshpit que aunque no fue tan memorable, motivó a muchos a unirse a los empujones. Sin duda emocionó a todos haciendo porque a lo lejos se podía ver cómo volaron camisetas, vasos de cerveza, gotas de sudor, manotazos, incluso en el escenario, también voló el micrófono del vocalista.
Pareciera que toda la energía desatada para The Devil Wears Prada, agotaría a los asistentes, pero todos aún expectantes al show de Silvertein, corrieron al baño, por cerveza, a saludar amigos, tomarse la selfie de recuerdo con los amigos y alguno que otro astuto logró saludar a lo lejos a los miembos de TDWP que desmontaban sus instrumentos entre el cambio de bandas.
El momento cúspide de la noche fue cuando llegó el último acto que muchos esperaron por más de seis años. El regreso de Silverstein se hizo realidad, pisando el escenario del Frontón México, comenzaron la noche interpretando “Ultraviolet”, abrazando y “endulzando” el oído de todo aquel que coreaba sus canciones.
Uno de los momentos más esperados y que se quedará en la memoria colectiva, que además muchos capturaron en su celular, fue cuando Silverstein interpretó “My Heroine” logrando un coro casi al únisono por todos los que estuvieron presentes en el foro.
Aunque faltaron algunas canciones en el repertorio, las tres bandas regalaron una noche que muchos recordaremos y que tal vez a los 40s volvamos a repetir, pero que sumará mucho en la memoria de toda una generación que a pesar de los años, sigue demostrando ser una de las más leales y que sin importar el pasar de los años, hace lo posible por presencial a esas bandas que acompañaron esos momentos grises de la adolescencia que perduran hasta la fecha.
