Desde poco antes del mediodía, los fans de DLD comenzaron a interactuar en la sala de chat, previo a la transmisión en vivo de la presentación de la banda mexicana.
Lo principal era tener una buena señal de internet y un dispositivo con excelente audio, con la única finalidad de sentir ese acercamiento con los integrantes, y también subirle a todo el volumen. Después, ponerse cómodo en algún lugar de la casa y acompañar el momento con algunas bebidas para refrescar la garganta.
Poco después de las 20 horas, la sala del chat vitoreaba intentando adivinar cuál sería la canción con la que abrirían el concierto digital.
Algunos espectadores en el chat comenzaron a compartir que ya se podía apreciar la transmisión, mientras otros tantos no tardaron en actualizar la página para encontrarse con un escenario donde el baterista anunciaba la pronta llegaba del resto de la banda.
Caminando y con apariencia tranquila apareció primero Francisco Familiar quien llegó directo al micrófono, luego PJ mostrando la comodidad de sus pies descalzos, tal vez para disfrutar mejor de la presentación. Y detrás de ellos dos, Erik Neville luciendo un cubrebocas con el logo de DLD; curiosamente este producto pronto encendió el espíritu de los internautas por ver dónde se podría conseguir.
Todo listo para comenzar lo que auguraba ser una gran noche de viernes de esta nueva normalidad. Los acordes comenzaron y tenían la firme intención de remontarnos al 2012, cuando estrenaron Primario, y así, arrancaron con los primeros dos temas de ese álbum, Animal y Arsénico.
Paco dio la bienvenida oficial, mandó un abrazo a la distancia e invitó a todos a corear desde sus hogares, mientras un banner anunciaba que la mercancía de este álbum que se vendiera durante el show sería autografiada por los integrantes de la banda, dejando así una tentativa oferta para quienes aprovecharon y adquirieron mercancía oficial.
Así pasaron cada uno de los temas del álbum; sin celulares que no permitieran tener una vista envidiable y sin el acompañamiento de otros asistentes mientras a una voz coreaban cada uno de los temas.
Sin embargo, los espectadores escribían en la sala del chat frases de las canciones como si cantaran a todo pulmón, interactuaban con los otros como si todos estuvieran en un mismo foro frente a un gran escenario escuchando a DLD.
Las cámaras fueron un integrante más de la banda que bailaba entre ellos sobre el escenario, dejando en la pantalla una hermosa combinación entre luces, voces, música y una clara imagen de todo lo que pasaba al otro lado de la pantalla. La primera parte terminó, luego de interpretar Viernes y Mi voz.
Luego de un breve descanso, nos regalaron un momento emotivo cuando PJ, quien se miraba nervioso, compartió a la cámara su sentir al respecto de esta nueva normalidad en conciertos; muy distantes de lo que recordaba hasta ese momento, pero no sin la firme intención de dar lo mejor para lograr un acercamiento más real con todos los que miraban en ese momento.
Así arrancaron una serie de complacencias que se obtuvieron mediante la interacción en redes y en la sala del chat, que sin duda, forman parte de sus temas más conocidos como El mapa de tus ojos, Reencuentro, Un vicio caro es el amor, Devuélveme, Pagarás, Noches de vinil, Dixie y Mi vida.
“Hasta siempre, hasta nunca… A ver, a ver. Perdón, vamos a volver a empezar”, dijo Paco, ya que sentían que iban a destiempo, demostrando así que era un programa en vivo y que no por eso no darían un show de calidad.
Luego de dos horas, el concierto virtual llegó a su fin, la banda se despidió entre ellos y mirando a las cámaras se inclinaron como un gesto de agradecimiento mientras gritaban el título de su última interpretación. ¡Hasta siempre!
Texto: Angie Montiel