Gorillaz regresaron con un nuevo material mucho mas rápido de lo que pensábamos.
Y es que apenas la banda digitalizada hace un año, a finales de abril, nos presentaban Humanz como un proyecto sumamente ambicioso con 22 temas entre los que había incontables colaboraciones con diversos artistas del Rock, Pop y Hip Hop.
Humanz fue un disco en que los Gorillaz se perdieron en su propio disco. Algo a lo que muchos llamaron como una “evolución”, para otros tantos (incluyéndome) fue sin dudarlo un declive que dio como resultado el peor disco de los liderados por 2D… ¡Si! ¡Si! Con todo y el Grammy a Mejor Álbum Alternativo que ganó.
Pero ya sabemos también como se manejan ahí con sus premios. Aunque debo aceptar que el concepto se entiende una vez viéndolo en vivo. Bendito Vive Latino. The Now Now lleva por nombre el nuevo material que consigo trajo una nueva alineación, o bueno, un integrante nuevo que llegó para suplir al bajista Murdoc que arrestaron y metieron a la cárcel por quien sabe cuánto tiempo.
Y que por cierto por ahí anda un link para firmar una petición para que lo liberen de sus fechorías. A todo esto, la mente maestra Damon Albarn decidió reclutar a un nuevo bajista para seguir con la promoción de The Now Now, que es nada mas y nada menos que Ace, el líder de La Banda Gangrena, la pandilla que en muchas ocasiones les causó problemas a Las Chicas Súper Poderosas en la gran ciudad de Saltadilla y que ahora es otro rufián cool dentro de una de las bandas más importantes de este siglo.
Para empezar The Now Now nos recibe con su primer sencillo, Humility, que contiene la única colaboración del jazzista y emblema del R&B, George Benson, que con su guitarra acompaña una fresca pieza que retoma un poco a los Gorillaz de antes, aunque todavía con los estragos que el Humanz les dejó.
La buena noticia es que 2D ya está cantando mas de nuevo a diferencia del álbum pasado donde perdió total protagonismo. El video de este track es entretenido y cuenta con la participación de Jack Black tocando su guitarra, mientras 2D se la pasa patinando en las playas de lo que parece ser ¿California? ¡Ah! Y también vemos la presentación de Ace, el nuevo bajista con un peinado relamido y con cara de que por él han pasado los años.
En Tranz regresamos a lo electrónico con sintetizadores y bajos medio funk. Muy parecido a Andromeda que fue de lo rescatable el año pasado. Esta canción nos da ánimos de seguir para escuchar Kansas a un ritmo mucho menor a diferencia de su antecesor. Y donde a pesar de no ser una mala canción, si nos la saltamos, juro que no pasa nada. Es una de esas que pasa desapercibida.
Sorcererz, siguiendo por esa misma línea rítmica de Kansas, suena un tanto repetitiva provocando un bajón que se vuelve casi fastidioso con Idaho en lo que es una tipo balada electrónica que torna un poquito interesante ya casi al finalizar, y que si no es por eso y por Lake Zurich llegando a salvar la fiesta, quitamos el disco de inmediato.
Gorillaz rescata un poco el álbum por medio del segundo sencillo, Lake Zurich, en otro corte de esos que últimamente les gusta hacer: electrónicos y acapella. Sin vocales y con unos cencerros y luminosos destellos de bellas melodías con los teclados.
Magic City es otro buen acierto de Gorillaz en The Now Now. De hecho, posiblemente la mejor canción del material con todo y que suena tremendamente pop pero que suena mágica con los arreglos que contiene. Fire Flies demasiada dub es otra que no tiene relevancia alguna, a la que se le une One Percent y todo lo experimental y psicodélico que aparenta ser, para cerrar con Souk Eye, otro de los sencillos que para nuestro infortunio…. si, adivinaron, también es malito y nada memorable.
Gorillaz nos sorprendió de nuevo al darnos la noticia bomba de tener un nuevo disco en apenas un año de haber lanzado Humanz, en el que inclusive aún continuaban en gira promocional. Era difícil pensar en que Gorillaz retomaría un poco de lo que los llevó tan lejos, pero existía esperanza.
The Now Now es sólo una extensión de Humanz, pero en esta vez con 2D de absoluto protagonista (que eso si es muy bueno) en una serie de tracks demasiado electro pop de los que se rescatan unos tres máximo, dejando el hip hop completamente de lado. En fin, así es la industria musical. Por fortuna para los artistas siempre habrá una Grammy ganado para tener con qué nos intenten callar la boca.
