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Ya estábamos llegando de nueva cuenta al Pepsi Center para ver a Franz Ferdinand. 

Fotos por: Atzin González

Cansado, ronco y adolorido un día después de tanto baile con LCD Soundsystem que se presentó un día antes en el mismo foro.

“Ese güey se equivocó de concierto (risas)”, escuchaba a un bato que me vio llegar portando una playera de LCD Soundsystem y entrando al venue.

Y es que esta vez no sería de nueva cuenta la banda neoyorquina la que se presentaría, si no de una escocesa que también ya es clásica y que marcó la juventud de muchos. Me refiero a Franz Ferdinand.



Las encargadas de abrir el show fueron las chicas tijuanenses Mint Field, quienes tocaron canciones de su más reciente material Pasar de las Luces. Pero no les fue muy bien con el público que realmente se mostró impaciente al chiflarles y gritarles de manera despectiva y en rechazo con comentarios que aparentaban ser graciosos de alguno que otro individuo en su grupo de amigos.



Mint Field hizo lo suyo con una ejecución bárbara, terminó su presentación y el público ovacionó muy fuerte por esa acción con algunos comentarios fuera de lugar que saltaban al aire como “pinche música aburrida“, “sí, ya lléguenle a la verga“; combinados por chiflidos de mentada de madre.



Aún no pasaban ni 15 minutos de haber terminado la participación de Mint Field, cuando de nueva cuenta se soltaron gritos de desesperación para que ya salieran los escoceses.

Hasta que a las 9:38 pm, al fin se apagarán las luces mientras salían uno por uno los integrantes, saliendo hasta el último (por supuesto) el líder y vocalista Alex Kapranos que portaba una bomber jacket con una Virgen María en la parte de la espalda bastante genial, del cuál no dudo en presumir para luego quitársela y empezar con Always Ascending y siguiendo con No You Girls y The Dark Of The Matineé con el primer baño de cerveza incluido.


”Es genial estar de vuelta en México. Me alegra verlos a todos aquí. Nos la vamos a pasar genial.” Kapranos, luciendo un look ochentero de camisa negra con estampados de telaraña y un pantalón de vestir, con un corte de cabello corto de enfrente y un tanto largo de atrás, dejando atrás aquella imagen de fleco largo con el que lo conocimos hace años.



Más éxitos siguieron sonando como Walk Away con washawasheo incluido de muchos a un lado mío, Do You Want To en donde más cerveza me llovió sobre la espalda y la nuca y Stand On The Horizon con gritos de mujeres extasiadas.

Un mensaje de aliento referente al tema del muro entre Estados Unidos y México, en el que por supuesto tenía que terminar en un “Fuck Donald Trump” para que todos enloquecieran, aventaran más cerveza (por si fuera poco) y continuara la buena fiesta que Franz Ferdinand traía con Jacqueline, Take Me Out con toda la gente saltando, Love Illumination y cerrar la primera parte con Ulyssses.

En el encore los británicos salieron a tocar Lazy Boy, Darts of Pleassure, Michael, Feel The Love Go y This Fire con el que subieron a tope todos los ánimos para cerrar el excelente regreso de una de las bandas más consentidas de una generación, pese a tener un público con muy malas actitudes y siendo el peor que me haya tocado vivir. Pero ese ya es otro tema aparte.

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