Es inevitable no verse atraído por el deseo de conocer el nombre de la canción que está sonando a través de las bocinas. ¿a poco no? Por eso y para eso Corona estará en el Carnaval Bahidorá dándote toda la música que quieres conocer.
La tecnología nos ha brindado herramientas para lograr ubicar canciones en cuestión de segundos, pero ¿qué sucede con las canciones que no están en línea?
Impulsados por esta curiosidad, Corona logra involucrar por completo esta cultura en el Carnaval Bahidorá. Invitaron a algunos de los selectores más prestigiados de los últimos años a uno de los escenarios más icónicos del Carnaval; El Asoleadero Corona.
El origen de la cultura selector se remonta a los primeros días de la radio, donde alguien tenía la labor de estar buscando constantemente la música que sonaría del otro lado del micrófono. Disponían de enormes cantidades de vinilos para musicalizar cualquier momento del día, su elección podía ser guiada por el clima, festividades o temáticas. Hasta la fecha, la radio y los Selectors siguen teniendo un vínculo fuerte.
Los objetivos de un Selector son buscar nuevos sonidos, artistas y clásicos que han pasado desapercibidos para presentarlos a un público. Tal vez se preguntan ¿Eso no es lo mismo que hace un DJ? Ambas profesiones nacieron de manera paralela y fueron bifurcándose mientras se creaba la cultura del DJ.
La música que se bailaba provenía de un formato físico (generalmente LP’s) con la transición más sutil posible; así se podía ir toda la noche. Años después esta tradición sería potencializada por la globalización de la música electrónica y su resultado fue el prototipo del DJ actual. Un artista que se ocupa de “tejer” dos (o más) canciones sin dejar que caiga el beat, baile, y ánimo de la fiesta.
El Selector puede compartir estas virtudes de DJ, pero lo que lo caracteriza es su cualidad de -lo adivinaron- selección musical. Podríamos decir que son amantes del vinilo, ya que dedican gran parte de su tiempo a investigar la historia de joyas musicales, rastrearlas, ir a buscarlas y, si es posible, conseguirlas.
La labor que realizan se puede relacionar fácilmente con la arqueología, ciencia que se dedica a investigar vestigios de otro tiempo e interpretarlos. Un arqueólogo se la pasa investigando para poder analizar ruinas, tumbas, cuevas, y encontrar objetos usados por personas que vivieron en otro tiempo para analizar su impacto en las personas de la actualidad. El selector hace una labor similar buscando rarezas o reliquias musicales, de esa manera las revive para la pista de baile.
Es toda una clase de música, historia y geografía escuchar a un gran Selector en las tornamesas, es un aprendizaje que se entiende con el cuerpo. En esta siguiente edición del Carnaval podremos atestiguar el fruto de años de búsqueda y una fina sensibilidad de curaduría musical por parte de estos genios de la arqueología musical en el emblemático Asoleadero Corona.