Hace 6 años vi a The Strokes por primera vez en el Corona Capital 2011 y aunque su presentación no fue precisamente la más animada, hubo buenos momentos y grandes canciones que acompañaron ese gran día cerrando el escenario principal del festival.
Terminando el 2017, uno de los guitarristas principales de The Strokes (Albert Hammond Jr.) visitó el Lunario del Auditorio Nacional de la Ciudad de México para tocar lo mejor de su carrera como solista, aquella que inició en 2006, y presentar Momentary Masters, su más reciente producción.
La gente que fue a ver a una de las cabezas de la banda era peculiar: jóvenes que no tenían mucho de haber comenzado a escuchar a The Strokes, godínez recién salidos de despachos, algunas personalidades de la música latina (Esteman y Dani Spalla) y chicos con playeras de bandas que iban llenando el lugar.
La noche inició con Lori Meyers, originarios de Granada, España, que sonaron más latinos que españoles intentando animar con su rock clásico y letras pegajosas que terminaron con dejando un buen sabor de boca a los asistentes.
El estelar de la noche llegó y una vibra especial se sintió; aunque Albert no tocó ni una sola canción de The Strokes, las influencias eran obvias: guitarras rápidas con una ligera distorsión, letras sobre crecer y vivir, voces cambiadas (muy a la Julian Casablancas & The Voidz) y un conjunto de músicos concentrados en hacer un buen show hicieron una presentación redonda.
Canciones como Side Boob, 101 o Born Slippy nos hicieron regresar a aquellos años donde The Strokes acompañaba nuestras primarias, secundarias y hasta preparatorias. Baterías y guitarras poderosas, llenas de rock, nos recordaron aquellas épocas donde el rock de The Hives, The White Stripes, The Libertines o The Vines sonaban en el soundtrack de la gente.
Albert impactó como el integrante de The Strokes que es; una entrega incondicional al público mexicano y un show en donde él disfrutó cada canción (incluyendo las nuevas que tocó).
