Split (Fragmentado) es la nueva película del director M. Night Shyamalan (The Sixth Sense, Unbreakable, The Visit), quien ha tenido altas y bajas en su carrera cinematográfica que han ido de los sublime a lo terrible (en el peor sentido de la palabra).
La película cuenta la historia de Kevin (James McAvoy), un hombre que ha desarrollado 23 personalidades distintas, todas ellas debidamente catalogadas y diagnosticadas por su terapeuta la doctora Karen Fletcher (Betty Buckley).
Una de las personalidades de Kevin lo obliga a secuestrar a 3 jovencitas, las populares Claire y Marcia (Haley Lu Richardson y Jessica Sula) y la introvertida y rechazada Casey (Anya Taylor-Joy). Sin saber por qué Kevin las retiene ahí, las tres chicas tendrán que encontrar la manera de salir antes de descubrir el plan siniestro que las involucra: “La Bestia”.
Es todo lo que podemos contarles sobre esta película sin arruinarles las sorpresas que les esperan.
Split (Fragmentado) es la nueva película del director M. Night Shyamalan (The Sixth Sense, Unbreakable, The Visit), quien ha tenido altas y bajas en su carrera cinematográfica que han ido de los sublime a lo terrible (en el peor sentido de la palabra).
Sin embargo, desde su película pasada The Visit, Shyamalan dio señales de vida y sorprendió con una película que mostraba el talento con el que nos sorprendió, pero con una visión diferente, renovada y deliciosamente extraña. Estas señales de vida, las confirma con creces en SPLIT.
La cinta es protagonizada por James McAvoy, quien se luce interpretando varias personalidades. Aunque hay una pequeña trampa y no alcanzamos a ver todas las 23 personalidades del todo, no deja de ser impresionante el trabajo actoral de McAvoy quien en momentos, no necesita de disfraces para transformarse, sólo su cuerpo que se modifica sutilmente, dando resultados realmente impactantes.
Como la contraparte de McAvoy está Anya Taylor Joy, quien desde The VVitch nos mostró sus dotes bárbaros para expresar el miedo y terror sin llegar a ser una scream queen. Ahora en SPLIT nuevamente se luce, en un papel un poco más exigente y fundamental para la película.
Aunque el misterio de la trama no me dejará entrar en detalles, quiero resaltar el nuevo aire que ha tomado el cine de Shyamalan, quien parece haber dejado sus forzados giros de tuerca que agotó en películas como The Happening o Lady in the Water, para enfocarse en un final menos trabajado, mejor ejecutado e igual de sorprendente. Las sorpresas quedan a un lado cuando Shyamalan comienza a desenrollar el suspenso que magistralmente va creando.
Me atrevo a decir que esta es la película de Shyamalan que más estilo Hitchcock posee, y no lo digo a modo de copia, lo destaco como una gran virtud. El talento del director de origen hindú siempre ha estado presente, pero su engolosamiento lo opacaba; en esta ocasión y como lo hizo en su joyita anterior The Visit, Shyamalan crea suspenso y horror con elementos cinematográficos básicos, sin tanta parafernalia. Es así como logra momentos de tensión a través de close ups, movimientos de cámara y uno de los trucos favoritos de su mentor Hitchcock: mostrar sólo lo necesario. M. Night parece haber comprendido que la imaginación del espectador es un arma muy poderosa en el cine de horror y suspenso.
Dudo que SPLIT sea la obra maestra de Shyamalan, pero si la colocaría un peldaño abajo, sobre todo porque supo cómo reinventarse manteniendo su estilo, y la ejecución en esta película es bárbara, como para no despegarte de la butaca hasta el final.
Y por cierto, el final…no les voy a revelar nada, pero si les gusta el cine de Shyamalan, van a salir igual de emocionados que yo de la sala de cine. Y si no son fans del director, no importa, igual la película es un viaje increíble.