Publicidad

El 2017 pinta bien para Café Tacvba, una de las bandas referente del rock mexicano que ha inspirado a las nuevas generaciones que utilizan su música como punto de partida para incursionar en el mundo del rock y las cajas de ritmos.

Hoy hablaremos del nuevo proyecto que se cargan  y que para muchos es una propuesta interesante, pero para pocos la decadencia del sonido original que se vuelve algo monótono y dejó de ser chévere desde el SINO lanzado en 2007.

Pero antes un poco de historia

Una banda originaria de Satélite que vio la luz a la música en 1987 bajo el nombre de Alicia no está aquí con Ruben Albarrán, Quique y Joselo Rangel y que en después de un par de toquines con Emanuel Del Real el 27 de mayo y 3 de junio del 1989, adoptaran el nombre que sería el must de los playlist latinoamericanos.

Con el sintetizador de Emanuel del Real, los guitarrazos de Joselo Rangel,  el estilo del contrabajo de Quique Rangel y la voz del mítico Rubén Albarrán en su papel de “Juan”, nos dejan su álbum homónimo que tras su lanzamiento en 1992 puso a los Tacvbos en la mira. El disco traía rolas que expresaban el under como propuesta innovadora con tintes del folk mexicano, letras irónicas y llenas de historias como el homenaje a José Emilio Pacheco con el track 2 Las Batallas y nuestro amor a las maestras, esa Noche Oscura que nos recuerda su presentación en el Zócalo de la CDMX, esas Persianas que bailamos al estilo del zapateo y slam, Rarotonga y su grito de guerra, La chica banda que es usada por los Tacvbos para cerrar conciertos y que recordamos en el concierto de XV años con Lino Nava que se sumó a la lista de invitados para el vals, la María bonita, el Pinche Juan que nos invita a danzar en paz, la protesta en contra del racismos con un toque irónico de Labios jaguar, El Bar Tacuba que nos invita a reventarnos casi diario que fueron adoptadas por la masa y por las siguientes generaciones que las usarían como estandarte y referencia del rock por su sonido chido/chévere/pandroso.

El 92 es un año mágico para los Tacvbos, ya que su música trascendió las fronteras para llevarlos a tocar al Lollapalooza en el Irvine Meadows Amphitheatre, en el festival europeo Les Trans Musicales, pero recordemos que en el 91 tocan en el New Music Seminar de Nueva York.

Después de su primera gira por Argentina y Chile lanzan el Re, su segundo álbum de estudio el 22 de julio de 1994 que tiene como productor a Gustavo Santaolalla, viejo conocido del primer álbum.

El éxito del álbum de 20 tracks se debe a la combinación de ritmos y estilos que mantenía la esencia del folk y del under como su propuesta desde 1989. Un gran álbum que cuenta historias marcianas en El Aparato, La Ingrata que se volvió un clásico para todas las clases sociales que se unen al baile del taconazo, El Borrego que saca el lado heavy de Meme (aunque escuche a Magneto cuando está su noviecita), El Metro que nos recuerdan una historia de amor del subsuelo que se alimenta de pastillas, paletones, chocolates, chicles y salvavidas, el clásico bolero del Madrugal dedicado a la Ciudad de los Palacios que refleja una ciudad hundida en smog y caca de paloma, la lucha de barrios del Tlatoani del Barrio, aquellas Flores que han sido coreadas en todos sus conciertos y el clásico que adoptamos todos sus fans al unísono del “Paparupapa eu euuuuu” que se ha vuelto pieza clave de la Tacvbología, El Baile y el Salón….

Tal éxito se vio reflejado en su MTV Unplugged de 1995 y posteriormente el lanzamiento del álbum Avalancha de Éxitos que contiene 8 tracks que nos recuerdan los covers de algunas rolas que forman parte de la historia musical al mero estilo de los Tacvbos, ¿Quién no recuerda el caló de la Chilanga Banda, alocarnos con el No Controles, la historia degenerada rescatada de las lúgubres historias amarillistas del Alarmala de Tos, el Ojalá que llueva café con el violín del profesor holocausto y Como te extraño, un viejo conocido de la música regional mexicana que nos hace corear su amor divino.

El lanzamiento del Revés Yo Soy sería para el segundo semestre del 96, en el que Revés explotaría su lado instrumental con la “2” que es muuuuuy buena y el Yo Soy que contiene rolas como La Locomotora, Dos niños, una oda al orgasmo La muerte chiquita, El Espacio que nos hace mirar al espacio exterior y pensar en lo diminutos que somos y también la rola de El Ave que nos remonta a un video en triciclo tamalero por la ciudad.

Pasaron unos años para que los Tacvbos dejaran nuevamente huella en la música, y lo hicieron con el lanzamiento del EP Valle Callampa, un tributo de 4 tracks a Los Tres de Chile, que llega con unos covers con una gran evolución musical por parte del cuarteto y una coreografía para el track Déjate Caer que la banda acogería en sus presentaciones.

El lanzamiento del Cuatro Caminos en 2003 nos muestra a unos Tacvbos con un sonido diferente, la sustitución de la caja de ritmos por percusiones reales y guitarrazos hacen de este álbum una buena propuesta. Recordemos a Élfego Buendía, el nuevo seudónimo de Rubén Albarrán y con trajes pastel, bailando el Eo que se acerca un poco al estilo de sus inicios pero borrado al 90% del álbum.

Del álbum rescatamos la rola Mediodía que nos hace buscar compartir la vista desde nuestra casa un sábado a mediodía, Eres como el must de los enamorados que ha formado parte de aquellas rolas dedicadas y choteadas por la muchedumbre, Encantamiento Inútil que muestra una gran evolución musical con los sintes de Meme, esa rolita de Puntos Cardinales que muestran a unos Tacvbos con una gran madures melódica y que sería el nuevo sonido de sus próximos discos que se ve influenciado por la producción de Gustavo Santaolalla, Andrew Weiss y Dave Fridman.

Después de proyectos alternos de la banda, llega el sexto álbum de los Tacvbos, el SINO. El primer sencillo de la banda fue Volver a comenzar que se tocó en el Festival Iberoamericano Vive Latino del 2007.

Sinceramente la presentación de la nueva rola fue un tanto cansada, ya que se aventaron la versión larga en la que Ixaya Mazatzin Tleyotl, nuevo seudónimo del vocalista, tendría más participación en los instrumentos y se rifaría unos riffs. Un álbum de 15 tracks muy diferente al los primeros dos en el que podemos ver evolución armónica y buena estructura lírica, dejando atrás el folk que llenaron los oídos de los 90’s y muy atractivo para las siguientes generaciones. Las rolas Seguir Siendo y Tengo Todo son muy buenas, Vámonos y Quiero Ver son de lo mejor del álbum, pero después de escuchar un par de veces Volver a Comenzar tenemos una aceptación más a huevo por la historia de la banda que por simple gusto.

Después de esto nos hace pensar que su sonido ha dejado de ser chévere… ¿El folclor, el caló y las rimas chidas que solían ser se fueron al carajo?, ¿La continuidad de una banda se vería afectada después de ser una propuesta muy buena del under a un rock/pop/putito/fresón y plástico?

La llegada del Objeto Antes Llamado Disco en 2013 rescata un poco de esto, un disco un poco más “Chairo”. La armonía musical se hace notar al tratar de combinar sonidos del rock pop con la música étnica que dan como resultado la Olita de Altamar que nos hace unirnos en paz y baile con Zopilote, el nombre que acompaña en este álbum a Rubén Albarran, en un ambiente de misticismos y sueños oníricos.

La rola Volcán es muy buena, su mensaje es directo y fue usado en el escenario como protesta en sus anteriores presentaciones. Aprovéchate de mí es una rola muy bien interpretada por Meme y Zopilote aunque fue compuesta por Joselo Rangel, ¿Sonaría igual con él?

A finales del 2016 nos vimos sorprendidos por una nueva rola de Café Tacvba, suena más chévere, más chairo, mas buena onda, buen sonido y buenos ritmos. Los coros son la onda, pero… suena como volver a comenzar… ¿Un rock pop fresa? En verdad moríamos por un nuevo material de los tacvbos, pero… ¿Cubre las expectativas de sus seguidores más longevos? Ese sonido nos gusta pero con el nuevo proyecto de Meme que en verdad rifa mucho.

Para cerrar esta aventura Tacvbeña en 2017 sale el segundo sencillo titulado Futuro, empieza con un sonido fuerte de sinte, un video con un arte espectacular, imágenes moviéndose al ritmo de los estrepitosos sonidos y de repente una voz aguda, y de fondo la de Rubén Albarrán, su mensaje es muy directo que nos hace pensar en el tiempo, “es una cuestión de tiempo, tan breve este momento en que eres y en que soy, tu mañana ya te fuiste y antes me dijiste: el futuro es hoy”. Rescatamos que no podemos saber nada del futuro pero temo decir que el futuro de la banda es incierto en el mundo musical si no lanza una mejor propuesta que estas últimas dos rolas, que han lacerado a una banda legendaria que viene en decadencia por navegar en un mar tan turbio sin rescatar el sonido original que amamos en los primeros cuatro álbumes.

Y las preguntas son: ¿Te gusta el nuevo sonido de los Tacvbos?, ¿Crees que les falta barrio?, ¿Su propuesta llena tus ganas de Café Tacvba? O simplemente, ¿Crees que es mejor retirarse con su historia o lacerarla hasta que digamos que esa banda se fue al carajo?

¿El folclor, el caló y las rimas chidas que solían ser se fueron al carajo?, ¿La continuidad de una banda se vería afectada después de ser una propuesta muy buena del under a un rock/pop/putito/fresón y plástico? ¿Cubre las expectativas de sus seguidores más longevos?

Paz y Baile!

Deja tu comentario: