Al parecer Weezer encontró en el verano toda la inspiración para crear un décimo álbum que puedo decir, es bueno.
Por: Rogelio Cejudo Esquivel – @prostmx
En el nuevo disco encontramos, elementos esenciales que son característicos de una banda como lo es Weezer, esto es, buenas letras y buenas melodías y que en sí, mucho de ese sentimiento tanto en letras como musicalmente, son una transmisión directa de la forma de captar la vida del vocalista Rivers Cuomo.
Y es que, creo que a muchos y me incluyo, Rivers Cuomo es un artista que además de influirte con esos lentes de pasta envidiables y camisas a cuadros, nos hace sentir las letras a través de calidad musical, una buena voz, buenas guitarras y buenos solos (para este disco sencillos). Pero además transmite toda esa ansiedad y sentimientos que el mismo vocalista tiene en su vida o encuentra en esos momentos rutinarios, ahora captados por él mismo en las playas de California.
Fue complicado escuchar a Weezer con este álbum de nombre White Album y es que no fue hasta la tercera ocasión que encontré, la esencia del disco, donde California y sus playas, así como su gente, son en sí todo el aspecto creativo detrás del mismo, sin omitir las pesadillas del mismo Rivers Cuomo.
Si dudan en entrarle a este disco, les pido de manera atenta, le presten atención a las primeras ocho canciones que componen el disco, para después escucharlo completo y así lo guarden en su mente, sobretodo lo disfruten en esta temporada calurosa de la Ciudad de México, así que, comencemos:
California Kids es una buena forma de abrir, con sonidos ambientales del oleaje del mar, en ella Rivers Cuomo, plasma la percepción que tiene sobre estos chicos californianos y como son capaces de disfrutar la vida de una manera sencilla, alejados de tanta complejidad.
Como una especie de predicador al estilo de iglesia protestante de los Estados Unidos, Weezer nos entrega Thank God For Girls, con una letra donde señala todo ese encanto contenido en una mujer tan fuerte y con un encanto fuera de lo cotidiano.
Con un cierto encanto del estilo de los Beach Boys, tenemos Girl We Got a Good Thing, una melodía de un chico-chica teniendo un momento lleno de alegría y de compartir todos esos momentos, como si no hubiera un mañana. En ciertos momentos parecería que Rivers Cuomo quiere hacerse presente y hacer notorio los problemas de esa última relación sentimental.
De esa ironía de mencionar cuando te encontrabas sedado y fuera de ti, tenemos Do You Wanna Get High? Y ¿por qué no?, tomarse un tiempo para estar con los sentidos alocados y con percepciones fuera de lo normal.
Como una canción explosiva y para todos aquellos que nos hemos sentido invencibles, tenemos King Of The World, capaces de hacer frente a todo y proteger a esa chica ante cualquier adversidad, ofreciéndole nada más que tranquilidad.
Summer Elaine And Drunk Dori sirve como una oda para cuando uno esta afligido y solo, para cuando nada funciona y todo se debería terminar, esta canción es sin duda un grito para cantarle a la soledad.
Y como la melódica octava canción tenemos L.A. Girlz donde se pide a las chicas de L.A. actúen conforme a su edad, no importa que tan bellas sean, dejen lo banal y compórtense de una forma más apegada a la normalidad.
Muchos de los fans de Weezer captados por aquél gran álbum Pinkerton de 1996, quisieran haber encontrado ese sonido que los tenía fuera de una línea hoy más orientada al estilo pop o consumista de la música, sin embargo, considero que las guitarras, voz, bajo y teclados, juegan un rol modesto para que Weezer haya entregado un disco interesante, hagamos a un lado todos los pensamientos de Rivers Cuomo y disfrutemos las canciones entregadas como una oda para ciertos aspectos que también son parte de nuestra vida diaria.
