Cuando pensábamos que ya había terminado el año, cuando estábamos ya listos para colgar los tennis del conciertos y comenzar a poner el árbol de navidad, surge otro festival para extender la temporada musical del 2015. El Live Out Fest, el último festival de año.
El Live Out Fest tendrá su primera edición este 2015, específicamente el 12 de diciembre en la Ciudad de Monterrey. La fecha tan cercana al final del año lo hace el ultimísimo festival y el cierre de la temporada musical en el país.
Anteriormente Trópico cerraba el año (sin contar los festivales electrónicos que cierran el 31 de diciembre) y Bahidorá abre la temporada en 2016. Esperamos que el Festival Live Out ponga en alto el nombre de los festivales más orientados al rock, y además que engrandezca la escena festivalera al norte del país.
Sin más preámbulo te presentamos el por qué según nosotros el Live Out Fest es una gran opción para cerrar el año.
Porque los Strokes
Ya sabemos que no es la primer vez que vienen los Strokes al país. Pero lo que es importante destacar de esta presentación, es que será en un festival mucho más pequeño que alguno con sede en el Distrito Federal. Y no por que sea más o menos que un Corona o un Vive Latino, simplemente porque la población es menor en la ciudad. Y eso significa, ¡más espacio vital!
Porque 45 grados y un chingo de cerveza
Este punto se describe solo. La Ciudad de Monterrey por sí misma vale la pena visitarse. Aunque el clima puede ser extremo, las fechas aliviarán el calor. Y si eso no te parece suficiente, siempre puedes beber cantidades industriales de cerveza y comer toda la carne asada que puedas para disfrutar.
Porque es en el Parque Fundidora
Y así como Monterrey, también vale la pena darse la vuelta a Fundidora nada más porque sí. Durante 4 o 5 años, el parque ha demostrado que puede soportar un festival de uno o hasta dos días, es cómodo y no muy alejado de la civilización. Así que punto para ellos.
Porque no está tan atascado
Mismo tema que en el primer punto. Los festivales primerizos, pequeños y fuera del Distrito Federal, tienen un encanto que por más que se intente, los festivales grandes no pueden igualar. Tener espacio vital al ver a una banda, menos filas, mucho menos que caminar y poco tráfico al salir… comparado.
Porque nunca es suficiente música
¡Que venga este y muchos otros festivales! Queremos rockear todas las noches y fiestear todos los días. No necesitamos excusa alguna para querer más música en vivo.
